Domótica y ahorro energético han ido de la mano desde que la tecnología se empezó a introducir en nuestros hogares.
Si hace unas décadas nos hubieran contado todo lo que podríamos realizar a día de hoy con la tecnología no nos lo hubiéramos creído: ¿conectarnos a internet desde nuestro móvil? ¿Escuchar música de forma ilimitada sin CD? ¿Ver películas en streaming? Nadie (o muy pocos) hubiera apostado un duro por un futuro como el que estamos viviendo. Sin embargo, el tiempo y los avances tecnológicos nos han demostrado que sí podía ser real. Todo a nuestro alrededor se ha modernizado a lo largo de los años...y con ello también lo han hecho nuestros hogares.
Pese a todo, es posible que la palabra domótica te sea completamente desconocida. Por eso, en este artículo no sólo te contaremos en más detalle qué es la domótica exactamente, también te contaremos cómo puede ayudarte a ahorrar en tu factura de luz.
¡Empecemos por el prinChippio!
¿Qué es la domótica?
La domótica engloba a un conjunto de sistemas o aplicaciones que son capaces de automatizar un edificio o vivienda ofreciendo beneficios en ámbitos como la seguridad, la comunicación, la seguridad o la gestión energética. En otras palabras: se trata de integrar la tecnología en el hogar o en un recinto cerrado.
A través de una conexión a internet, la domótica permite controlar dispositivos de iluminación, equipos de climatización o ventilación, persianas y toldos y otros electrodomésticos con total facilidad. Así, podemos conseguir reducir trabajo doméstico, mejorar la seguridad de nuestra vivienda o incluso ahorrar consumo.
Ventajas de la domótica
Como imaginarás, con la domótica básicamente todo son ventajas. Al final, estamos convirtiendo nuestro hogar en algo más inteligente que nos ayude a ser más eficientes con nuestro tiempo y nuestros recursos.
Pero vamos a analizar sus pros principales:
- Ahorro energético: domótica y ahorro energético son una combinación perfecta. Con ella podrás controlar factores que te ayudarán a ser más eficiente con el consumo de gas, luz o agua, ya que te permite programar el apagado y encendido de todos los aparatos. De este modo podrás automatizar el apagado de luces cuando no hay nadie en casa o cuando te vas a dormir, e incluso garantizar que la temperatura de tu vivienda sea óptima o se fije en modo ahorro.
La domótica puede permitirte gestionar distintos comportamientos al detectar tu presencia, por lo que es una forma de poner tu hogar en piloto automático para potenciar tu ahorro de energía a largo plazo.
- Comunicación: como no podía ser menos, la domótica también ha ayudado a mejorar la comunicación. De hecho, gracias a la domótica puedes incluso comunicarte con tus mascotas cuando no estás en casa, lo cual no deja de ser un alivio cuando no puedes estar cerca de los tuyos (y seamos sincer@s, ¿quién quiere estar un segundo separado de tus mascotas?). Además, mediante asistentes de voz y otros aparatos domóticos puedes hacer que se reproduzcan mensajes en casa o realizar llamadas estés donde estés sin necesidad de llamar a tu número fijo.
- Seguridad: además de permitirte programar el encendido y apagado de luces para simular que la casa sigue habitada mientras estás fuera, la domótica también puede ayudarte en tareas como la detección de intrusos, incendios, o incluso fugas de gas y escapes de agua. También pueden detectar caídas y proteger así a las personas mayores.
- Confort: la domótica puede ayudarte a detectar la cantidad de luz que entra en las habitaciones o el viento que hace para abrir o cerrar automáticamente las persianas y gestionar mejor la luminosidad y bienestar en toda la casa.
- Monitorización: a través de la domótica, podemos controlar al detalle cada uno de los sensores que tenemos en casa para entender mejor nuestros hábitos y ayudarnos a reducir costes.
Desventajas de la domótica
Lo sabemos, no todo son alegrías y ventajas. La domótica, como todo en esta vida, también tiene sus contras y desventajas. Por ejemplo:
- Costes de instalación elevados: tener una instalación domótica completa en casa es caro, no nos vamos a engañar. Principalmente porque debes cablear toda tu casa, pero también los dispositivos suelen tener precios considerablemente altos. Tómatelo como una inversión, puesto que a largo plazo el ahorro energético será considerable y tendrás un retorno de la misma.
- Deberás realizar mantenimiento: no es necesario que lo hagas de forma frecuente, pero deberás hacer un mantenimiento de tu instalación domótica. Ten en cuenta también que si se produce algún fallo, es posible que se produzca un error en cadena de los dispositivos, lo cual te repercutirá en cuanto a costes.
- Puedes tener problemas de conexión: si vas a realizar una instalación domótica, asegúrate de que tu velocidad de conexión a internet es buena. De lo contrario, podría sobrecargarse la red y provocar retrasos en las funciones de cada dispositivo.
¿Cómo ahorro energía con la domótica?
Exprimir la domótica y ahorro energético es muy fácil, y a estas alturas seguramente ya te estés imaginando algunas de las posibilidades que tienes a tu alcance. Ahí van algunas:
- Podrás controlar si te has dejado una luz encendida (o que se apague automáticamente cualquier luz cuando te vayas): a través de detectores de presencia puedes hacer que las luces se apaguen cuando no hay nadie en casa, o hacerlo fácilmente desde tu móvil. Se terminó dejarte aquella luz encendida porque saliste a toda prisa para no llegar tarde a tu cita con amigos (seamos sinceros, posiblemente llegarás tarde igual, pero por lo menos no gastarás de más).
- Podrás programar electrodomésticos: una pieza clave para el ahorro. El hecho de poder programar lavadoras, secadoras, aires acondicionados o calefacciones supone un cambio drástico en el consumo, que sin duda afectará a tu bolsillo. No gastarás de más, serás mucho más eficiente, y podrás concentrar tu gasto energético en las horas en las que la luz es más barata.
- Podrás regular la intensidad o terminar con el stand-by: a través de una instalación domótica, se puede detectar la cantidad de luz en una estancia de la casa y regular la intensidad de la luz en ella, consiguiendo así un mejor confort y una eficiencia energética total. Además, te permitirá controlar el stand-by, es decir, aquellos aparatos que siguen consumiendo electricidad sin estar en uso.
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